Ofelia. J. Everet Millais. Ofelia y la muerte
Entre lirios y trinos
Al amanecer
Ofelia late
Como una estrella
Entre los pliegues
Del agua por las noches
Resplandece eterna.
OFELIA Y LA INGENUIDAD...
Las flores que cogió, ingenuamente
van palideciendo en sus dedos largos,
se amarillea la luna, y también la lenta lluvia
de los siglos sobre ella...
Mas Ofelia,
criatura de agua verde y cristalina,
dulce canto esparcido por el río como un ahogado ruiseñor,
sigue cantando y cantando bajo el agua,
ignorando los brazos de cieno de la muerte...
Con su mirada de nardos recién nacidos
traspasa la gruesa exclamación del río que llora:
Nuestro río de tiempo.
Con su mano mojada de hierbas saluda
al amanecer,
a los pájaros,
a los ojos cerrados de los árboles.
Ofelia sigue cantando
bajo las masas atónitas del agua:
y canta en ti,
y canta en mi,
la poesía de un fluir eterno.
¡Ofelia no sabe lo que es morir!
Y como no lo sabe no muere
nunca.
***